A lo largo de toda la historia de la Humanidad han existido movimientos de población de unos lugares a otros en muchas ocasiones provocados por violación de Derechos Humanos. En torno a estas personas surge el concepto de Protección Internacional, una figura legal que trata de protegerlas de las circunstancias de peligro de las que han huido dándoles acogida en los países de destino. Estas personas se enfrentan a obstáculos para acceder a derechos económicos, sociales y culturales exponiéndoles a menudo a situaciones de desprotección y vulnerabilidad social.

 

Las personas solicitantes de protección internacional enfrentan otro grave obstáculo: no pueden acceder a un permiso de trabajo hasta transcurridos seis meses desde la formalización de su solicitud. Además, esta acreditación temporal está sujeta a renovaciones de la documentación en tanto no obtengan resolución, trámites que en ocasiones se ven obstaculizados por las dificultades para obtener citas.

 

Fuentes:
CEAR, Cruz Roja.